Internet ha revolucionado la forma en que las personas manejan sus finanzas en las últimas dos décadas. En lugar de sucursales físicas, los clientes utilizan principalmente los sitios web o aplicaciones bancarias, lo que hace que una buena experiencia de usuario sea vital.
Ahora imagine que es alguien con una discapacidad visual, auditiva o cognitiva que depende de tecnologías de asistencia para acceder a contenido y servicios. La capacidad de acceder a información financiera personal sin limitaciones es fundamental para las personas con discapacidad. Ahí es donde la accesibilidad digital es un factor en el proceso de desarrollo de software.
Hay más personas con discapacidad en la población general de lo que podría imaginar: aproximadamente una de cada cinco personas Uno pensaría que sería prioritario diseñar sitios web de servicios financieros para que sean fáciles de usar específicamente para un segmento de población tan grande; Sin embargo, este no es siempre el caso.
QA Financial, una compañía independiente de información, recursos y eventos centrada en ayudar a las empresas de servicios financieros a mejorar la calidad del software, realizó recientemente una encuesta a estas empresas (incluidos bancos, pero también compañías de seguros, gestores de activos) y descubrió que muchas de ellas no Asegurar adecuadamente que sus propiedades digitales sean accesibles. Específicamente, la encuesta encontró:
■ Solo el 35 por ciento de los líderes de software en los servicios financieros dicen que la accesibilidad es una de sus principales preocupaciones estratégicas.
■ Solo el 25 por ciento está incorporando pruebas de accesibilidad en el desarrollo de software. La atención a la accesibilidad generalmente es impulsada por acciones legales o quejas.
■ Más del 70 por ciento de las empresas de servicios financieros indican que no existe una clara política sobre la accesibilidad digital dentro del gobierno.
■ Menos del 30 por ciento de las empresas de servicios financieros tienen indicadores clave de rendimiento (KPI) confiables o significativos para la accesibilidad.
No invertir y practicar la accesibilidad puede tener varias ramificaciones negativas. Más allá del tamaño del mercado para personas con discapacidades, también hay que considerar el daño potencial de la marca. Esto es particularmente peligroso para las empresas de servicios financieros cuyas ofertas se están convirtiendo cada vez más en productos básicos y tienen el desafío de destacarse por otros medios, incluida la responsabilidad social corporativa.
Las propiedades digitales inaccesibles también pueden traducirse en riesgos legales, que muestran que las demandas relacionadas con la accesibilidad crecieron.
La buena noticia es que nunca es demasiado tarde para garantizar la accesibilidad, incluso para el software que ya está en uso Hay acciones y ajustes relativamente simples que se pueden hacer, como subtítulos para sordos; insertar el texto alternativo para acompañar imágenes para ciegos, autocompletar contraseñas para personas con discapacidades cognitivas.
A muchas empresas les resulta útil trabajar con expertos en accesibilidad digital, pero los nuevos desarrollos.
Sin embargo, la forma óptima de abordar la accesibilidad digital es aplicarla en el proceso de desarrollo, lo que significa incorporar la accesibilidad tan pronto como la fase de diseño del proceso de desarrollo de la aplicación. Usando estudios previos de IBM como referencia, el coste de arreglar un defecto en la producción puede ser hasta 30 veces mayor que abordarlo desde la fase de diseño o desarrollo. Esto no tiene en cuenta los posible coste legal si la actualización del software es el resultado de una denuncia.
Conclusión: en sus esfuerzos por crear sitios web que ofrezcan una experiencia de usuario buena, las empresas de servicios financieros han dado grandes pasos, ofreciendo interfaces de usuario innovadoras e intuitivas. Pero a menos que se priorice la accesibilidad digital como un pilar clave de la experiencia del usuario, estos esfuerzos pueden ser en vano para un segmento importante de la población. Muchas empresas creen erróneamente que lograr la accesibilidad digital es demasiado costoso y requiere mucho tiempo, cuando de hecho, los riesgos y los gastos potenciales de no abordar la accesibilidad digital son mucho mayores.
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